martes, 27 de enero de 2009

MEDICINA NATURAL


A veces practico las normas que pongo a continuación, para mejorar mi salud y hacen que me sienta mejor. Le tengo mucha fe a la medicina natural. Si acompañamos nuestro empeño por encontrarnos bien, con una alimentación sana, nuestro esfuerzo se verá recompensado.

Una sonrisa para la curación
Una forma de practicar la auto-sanación es imaginar los órganos internos dentro de nosotros con una sonrisa amplia y alegre. Es una manera de estimular a nuestras células para que se encuentren mejor. Nosotros mismos al imaginar este nuevo estado en los órganos estamos logrando dar un dosis de positivismo a nuestro interior, logrando como consecuencia elevar nuestro nivel interior tanto físico como mental.
Por ejemplo si uno se encuentra con depresión podemos imaginarnos la zona de los pulmones y corazón con una gran sonrisa. Si uno tiene dolor de cabeza, nos imaginamos nuestro cerebro con una gran sonrisa que nos ayudará a quitar el fruncido del entrecejo y así actuaremos en cada órgano que necesitemos activar positivamente.
Que tengas una buena práctica y que te sonrías mucho. Quiérete

jueves, 15 de enero de 2009

LE DIJO A LA LUNA EL SOL

Le dijo a la Luna el Sol:
Desde la tierra
Nos miran con admiración.
A mi con pupila pequeña
Y con gafas de protección.
A ti con pupila grande
Cuando no les alumbro yo.
La luna le contesto:
Si, pero a ti nadie te mira,
Con el amor con que te miro yo.
Autor. José Alcaide
Cuenta una leyenda: Que cuando el Sol y la Luna se encontraron por primera vez se enamoraron perdida mente y a partir de ahí vivieron un gran amor. El mundo aun no había sido creado. Y cuando fue creado, ellos recibieron un toque final ¡El brillo!

Quedó decidido también que el Sol iluminaría el día y la Luna iluminaría la noche, siendo así estarían obligados a vivir separados.

Les invadió una gran tristeza y cuando se dieron cuenta de que nunca mas se encontrarían, La Luna fue quedándose cada vez mas angustiada y a pesar del brillo concedido fue tornandose solitaria.

El Sol a su vez había ganado un titulo de nobleza “Astro Rey” pero eso tampoco le hizo feliz.

Cuando la Luna es feliz consigue ser llena, pero cuando es infeliz es menguante y cuando es menguante, ni siquiera es posible apreciar su brillo.
Luna y Sol siguen su destino. Él, solitario, ella rodeada de estrellas. Creadas para que le hicieran compañía.
A pesar de esto, cada día, la Luna, estaba más débil.

El Sumo Creador en su infinita bondad decidió que ningún amor en este mundo fuese del todo imposible, ni siquiera el de la Luna Y el Sol. Fue entonces, que Él, creó el eclipse.

Hoy Sol y Luna viven esperando ese instante, esos raros momentos que les fueron concedidos y que tanto cuesta que sucedan.

Cuando mires al cielo a partir de ahora, y veas que el Sol cubre la Luna, es porque se unen en un puro abrazo y comienzan a amarse. Es a ese acto de amor al que se le dio el nombre de eclipse.

Es importante recordar que el brillo de su éxtasis es tan grande, que se aconseja no mirar al cielo en ese momento, tus ojos pueden cegarse al ver tanto amor.

Me gustó tanto esta leyenda que he querido compartirla con vosotros. Junto, con la poesía, que mi hermano José me ha dejado.

jueves, 8 de enero de 2009

LAS CUATRO VELAS

En la Web he visto este escrito de autor desconocido, me ha gustado y deseo compartirlo con todos vosotros,

Cuatro velas se estaban consumiendo lentamente.
El ambiente estaba tan silencioso que se podía oír el diálogo entre ellas.

La primera dijo:

-¡Yo Soy la Paz! A pesar de mi Luz, las personas no consiguen mantenerme encendida.Y disminuyendo su llama, se apagó totalmente.

La segunda dijo:

-¡Yo me llamo Fe! Infelizmente soy superflua para las personas, porque ellas no quieren saber de Dios, por eso no tiene sentido continuar quemándome.Al terminar sus palabras, un viento se abatió sobre ella, y esta se apagó.

En voz baja y triste la tercera vela se manifestó:

¡Yo Soy el Amor! No tengo mas fuerzas que quemar. Las personas me dejan de lado porque solo consiguen manifestarme para ellas mismas; se olvidan hasta de aquéllos que están a su alrededor.Y también se apagó.

De repente entró una niña y vio las tres velas apagadas. -¿Qué es esto? Ustedes deben estar encendidas y consumirse hasta el final.

Entonces la cuarta vela, habló:-No tengas miedo, niña, en cuanto yo esté encendida, podemos encender las otras velas.

Entonces la niña tomó la vela de la Esperanza y encendió nuevamente las que estaban apagadas.


¡Que la vela de la Esperanza nunca se apague dentro de nosotros!